SPOLIARIUM-MACELLUM BLOG DE MONCADA MEJÍA S.A.S.: abril 2014

martes, 15 de abril de 2014

IGLESIA DOCTRINERA DE SUTATAUSA SAN JUAN BAUTISTA

UN ARTE PARA LA EVANGELIZACIÓN

Fachada frontal y acceso central parque principal

Nave central

En Colombia se construyeron 22 conjuntos doctrineros, de los cuales quedan 4 y el más interesante y conservado es el de Sutatausa; se preserva el templo, la plaza atrial y sus cuatro capillas posas. Adicionalmente al interior del templo existe una iconografía referente a la Pasión de Cristo y su Resurrección, descubierta solo hasta 1996 por el Instituto Colombiano de Antropología e Historia ICANH. En el registro de recuperación se dice que removieron 5 capas de cal, descubriendo 8 murales del viacrucis de Jesús. Se estima esta pintura mural hecha con vegetales del siglo XVII. Impactante esta revelación.

Altar principal

El 9 de agosto de 1594 el oidor Miguel de Ibarra visitó Suta y Tausa y ordenó construir las iglesias de ambos poblamientos, siendo encomendero el fundador de estas poblaciones el conquistador Gonzalo de León Venero.

Detalle pintura mural última cena

Tausa ya tenía una pequeña enramada de bahareque , cubierta de paja, la cual debía mejorarla y levantar la otra en Suta, en un tiempo de 8 meses, período que no cumplió, según visita del oidor Luis Enríquez el 17 de julio de 1600.

Detalle inferior Juicio Final

La iglesia doctrinera actual fue de los franciscanos en sus inicios y se erigió según archivo en
Tunja del 1 de junio de 1642, según dato de archivo tardó 300 años en construirla.

Entre la construcción del templo de una nave y 1750 se adicionó la capilla baptisterio a los pies del templo y otra capilla bajo la advocación de Nuestra Señora de Los dolores. En el último tercio del siglo XVIII se construíria una nueva capilla a la Cofradía de San Juan Bautista y camarines para estas capillas.

En 1818 el cura Pedro José Nieto Forero reconstruye la torre del templo.

A CONTINUACIÓN FOTOS CON EXPLICACIONES MÁS DETALLADAS DE CADA REGISTRO

Panorámica nave central, al fondo altar de masdera decorado con filigrana de oro

Detalle altar principal: Santo Domingo de Guzmán y San Antonio de Padua

Detalle Altar principal: San Juan Evangelista al centro, arriba pintura mural de La Sagrada Eucaristía

Detalle Altar principal: San José y Jesús niño

Detalle tabernáculo

Arco toral pintura vegetal naturaleza

Panorámica desde altar, al fondo coro

Altar lateral izquierdo de Jesús Recusitado en transepto izquierdo

Altar lateral izquierdo de La Dolorosa en transepto derecho

Detalle pintura mural transepto derecho

Arco toral entre presbíterio y templo

Detalle retablo en madera cuerpo superior derecho

Detalle retablo en madera cuerpo superior izquierdo

Detalle cuerpo medio hornacinas de Santo Domingo de Guzmán

Detalle cuerpo del medio hornacinas de San Francisco de Asís y San Antonio

Sagrario altar principal

Imagen en bulto de San Francisco de Asís

Detalle Altar principal: San Juan Evangelista al centro, arriba pintura mural de La Sagrada Eucaristía.

En la parte superior encontramos un frontispicio presidido por una custodia
dorada de tipo sol, bajo la cual aparecen tres cabezas de querubes entre
nubes, complementado con dos ángeles portando instrumentos de la Pasión
y que sostienen un manto a modo de baldaquino.

Detalle hornacin de posiblemente de Santa Clara o La Virgen

Hornacina con imagen de Santo Domingo de Guzmán

Panorámica nave central

Ingreso al potro de torturas

Potro de torturas, éste consistía en un estiramiento del cuerpo nhasta fracturar los huesos

Ornamentación parte superior altar lateral de La Dolorosa

Interesante pintura donde observamos la corona de espinas, los tres clavos de Cristo y un poporo muisca, el cual era un recipiente utilizado para el mambeo de hojas de coca en ceremonias religiosas

Detalle parte superuior predela

Pintura mural deteriorada de corazón atravesado por una espada

Capillas posa: excepcional es el caso del conjunto doctrinero de
Sutatausa, por conservar sus cuatro capillas posas, tres de ellas originales y
una cuarta reconstruida en la década de los años sesenta.

Baptisterio

Vista desde transepto derecho

Confesionario

Placa que dice: "SE EDIFICO ESTA CAPILLA A ESPENSAS DEL CURA ACTUAL DON PEDRO JOSE NIETO Y FORERO SE CONCLUYO AÑO DE 1825"

Artesonado cubierta

Cristo em madera de artista quiteño en la sacristía

Muro del Evangelio

Muro de La Epístola

Detalle última cena y oracuión en el huerto de Los Olivos

Detalle Juicio final

Oración en el huerto de Los Olivos

Mayor detalle última cena

Detalle flagelación bastante perdida la imagen

Detalle coronación de espinas

Detalle Ecce Homo

Detalle crucifixión

Detalle Juicio Final

Juicio Final

Detalle pintura mural de la esposa de un cacique (cacica) vestida con la manta típica indígena

Detalle arco toral izquierdo abajo indígenas, arriba Santa Catalina y en la imposta del arco toral escudo heráldico de anagrama de Cristo

Detalle arco toral derecho abajo indígena, arriba Santa Úrsula y en la imposta del arco toral escudo heráldico representa un calvario, las llagas de San Francisco y los tres clavos

De arriba hacia abajo: Escudo heráldico, Santa Catalina e indígena

De arriba hacia abajo: Escudo heráldico, Santa Úrsula

Arco toral y transepto izquierdo

Detalle jamba arco toral, jarrón dorado con frutas y flores

Detalle pintura mural de columna de fuste liso

Detalle pintura mural de columna de fuste acanalado

Detalle pintura mural transepto izquierdo

Juicio Final: "PINTOSE . ESTE JVIZIO / A DEVOCION . DEL . PVE /
BLO . DE SVTA. SIENDO / CACIQVE . DON . DOMINGO / Y CAPITANES
. Dº LAZARO, don Juº / neaetariguia, don Juº corula y don and. (¿rés?) /
Año 163-». Esta inscripción identifica a los caciques orantes retratados en el
arco toral, ubicados bajo las representaciones de Santa Catalina y Santa Úrsula.

Pintura mural en Baptisterio

Detalle pintura mural Crucifixión y exaltación de la cruz

Detalle pintura mural torre

Detalle pintura mural detrás de altar principal

Patio casa cural

Casa Cural

Almas del Purgatorio 1781 Gregorio Vásquez de Arce y ceballos

Museo Religioso en la casa cural

Armonio siglo XVIII

Óleo de Santiago el mayor

Óleo de San Bartólome

Óleo de posiblemente de San Atanacio

Óleo de San Pablo

Óleo de San Juan

Óleo de San Judas Tadeo

Óleo de San Felipe

Óleo de San Matías

Óleo de San Mateo

Óleo de San Tadeo

Óleo de Nuestra Señora de Chiquinquirá

Detalle Virgen orante

Óleo de San Buenaventura

Detalle libro del óleo de San Buenaventura

Detalle antiguo víacrucis

Víacrucis

Detalle óleo Virgen del dolor

Óleo de San Gabriel Arcángel

Tríptico alegórico

Imagen de Santa Barbará

Frontal óleo de las ánimas del purgatorio

Casulla del siglo XVIII

Detalle sotabanco de Juan El Bautista

JUDAS ISCARIOTE

"La verdad es el alma de los honestos. La mentira, el alma de los cobardes. La traición, el alma de los miserables." Víctor Hugo. El Averno de Dante Dante Alighieri en su memorable libro La divina comedia reserva a los traidores el último círculo del infierno, en donde tienen un apartado especial los tres canallas supremos de la historia: Judas Iscariote, Casio y Brutus (los asesinos de Julio César). Dante dividió La divina comedia en tres secciones: Inferno, Purgatorio y Paradiso. «Inferno», escrita a principios del siglo XIV fue, con mucho, la más leída y memorable. En el mundo de Dante, la traición es uno de los siete pecados capitales (el peor de ellos, en realidad), castigado con el noveno círculo del infierno, ejemplificado en el acto de traicionar al ser amado. El acto más conocido fue, el pecado de la traición de Judas a Jesús, una infamia que Dante consideraba tan vil que confinó a Judas a una región situada en el centro mismo del infierno y que llamó Judeca (en honor a su huésped más indigno). El escritor y poeta florentino redefinió la percepción medieval de la condenación eterna. Nunca antes el concepto de infierno había cautivado a las masas de un modo tan intenso. La obra de Dante convirtió el concepto abstracto en algo aterrador. Era una visión visceral, palpable e inolvidable del inframundo. Tras la publicación del poema, las iglesias católicas disfrutaron de un inusitado incremento en la asistencia de «pecadores aterrados» que querían evitar caer en la versión del Averno según la dantesca concepción.

OMAR ORTIZ. Pintor Mexicano

Nace en Guadalajara, Jalisco, México en 1977, donde aún reside. Despierta un gran interés por el dibujo y la ilustración desde temprana edad. Cursa la Licenciatura en Diseño para la Comunicación Gráfica, donde aprende a trabajar con diferentes técnicas como el dibujo, pastel, carboncillo, acuarela, acrílico, y la aerografía. Al terminar sus estudios de Diseño Gráfico decide dedicarse al mundo de la pintura. En el año 2002 Cursa sus primeras clases de Oleo con la Pintora Carmen Alarcón a la cual considera su principal maestra de Artes Plásticas. Actualmente Pinta al Oleo por considerarla la técnica más noble “Desde que comencé a pintar siempre he tratado de representar las cosas lo mas real que puedo, algunas veces lo logro y otras no pero lo que es un hecho es que para mi es muy dificil hacer lo contrario. Disfruto mucho el reto de reproducir los tonos de la piel con luz natural y los matices que nos brinda, particularmente en ambientes muy iluminados. Me gusta mantener la simplicidad en las piezas ya que creo que los excesos nos vuelven más pobres que ricos.”

CORCELES Y CARROS DE FUEGO

Representa la gran guerra entre Dioses y titanes, un gran número de córceles que arrastraban el carro de Helios. Se desconoce el motivo por el cual al final únicamente quedaron tres, y tampoco se conocen sus identidades. Entre los cuatro hermanos, Boreas parece ser el más poderoso e importante, se le representa con apariencia humana, y no como un caballo como el resto de sus hermanos. Cuando el titán Atlas raptó de los cielos a Helios, el Dios del Sol, los Córceles de fuego sin su amo para gobernarlos, llevaron al carro del Sol a la tierra, aterrizando en las proximidades de la ciudad de Maratón. Adentrándose en el templo de Helios, situado en el propio carro del Sol, Kratos debe buscar y despertar a los tres córceles, los únicos capaces de localizar el paradero actual de su dueño e ir hacia él. Para ello Kratos debe liberar sus espíritus, que cada uno de ellos guarda reposo en tres estatuas en su honor repartidas por el templo. Al despertarlos, los córceles de fuego llevan el carro, con Kratos montado en el al inframundo, el lugar donde mantienen preso a Helios. Impedida su entrada al Hades, al ser seres de luz, los córceles son obligados a abandonar a su suerte el carro del Sol y, por consiguiente a Kratos. Los córceles de fuego aparecen, cuando son convocados por Helios para luchar contra los titanes que escalan el monte Olimpo. Más tarde, el Dios Sol montado en su carro llevado por los córceles lucha contra el poderoso titán Perses; cuando Kratos daña el carro, gracias al uso de una ballesta

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martes, 15 de abril de 2014

IGLESIA DOCTRINERA DE SUTATAUSA SAN JUAN BAUTISTA